Según muchos estudios realizados desde hace décadas, demuestran claramente que hay un gran porcentaje de personas que no están satisfechas con su aspecto físico, sea cual sea su peso corporal. Si a esto le añadimos que la persona tiene sobrepeso la cifra se dispara.
La insatisfacción con la imagen corporal en la obesidad no solo es una motivación frecuente para intentar bajar de peso sino también puede ser motivo de un importante y significativo impedimento y malestar crónico ya que influye en los pensamientos, sentimientos y conductas repercutiendo además notablemente en la calidad de vida de quien la padece.
El cuerpo físico es la expresión externa de todo lo que somos, sin él no sería posible la vida y él es el instrumento que nos acompaña en este caminar.
El cuerpo es mucho más que un conjunto de células y órganos perfectamente organizados que tratan de cumplir su función de Mantenernos con vida. El cuerpo es la expresión de nuestra identidad.
Nuestro cuerpo y nuestra mente, mantienen una unión inseparable, así que si hay algo en tu cuerpo que te molesta demasiado, no te dejará relacionarte abiertamente con los demás, porque tu atención estará centrada en aquello que nos soportas de ti.
Vivimos en la era de la imagen y el cuerpo. Hoy día socialmente, se le sigue exigiendo a la mujer un determinado tipo para ser atractiva y tener éxito.
Pero, el atractivo personal, no se basa exclusivamente en tener “medidas perfectas”, el atractivo personal, se basa en algo mucho más profundo e interesante; nuestra forma de ser y estar en la vida.
Cuando te sientes atraída por una persona, no necesariamente es por su aspecto físico, sino que prestamos más atención a cómo se mueve, expresa y lo que nos sugiere esa persona.
Cuando nos fijamos en alguien y decimos que nos gustan sus ojos, en realidad lo que nos atrae es la forma en que nos mira. No es simplemente su boca lo que sentimos que es sensual, sino cómo se expresa o gesticula con ella, como sonríe. También encontramos personas muy atractivas que en realidad lo que desprenden es una sensación de que están en paz con ellas mismas, que saben lo que quieren o que transmiten una sensación de estar y vivir la vida con un propósito. Esto aunque imperceptible y menos aireado es lo que convierte a una persona en irresistible.
La psicóloga clínica Patricia Villalba, en una investigación publicada en la revista especializada Psicología Práctica dice: “No hemos de desequilibrar nuestra personalidad dedicando más tiempo, pensamientos, energía y recursos, a nuestra imagen física que al resto de nuestras cualidades. Hemos de cultivarlas todas”. “Si aprendemos a querernos más, descubriremos la belleza natural que hay en nuestros rasgos personales, si la mimamos y realzamos sin obsesiones, todos la verán también”.
Eva Gizowska, experta en bienestar y psicología autora del libro Seducción: 100 consejos para atraer, existe una serie de maneras completamente cautivadoras de ser irresistible. Según esta autora, “No hace falta ser guapo para resultar atractivo. Más que un cuerpo atractivo, lo que cuenta es tener una mente seductora. La seducción no tiene que ver con la perfección física, sino con la forma de actuar”. De acuerdo con Gizowska, “ser seductor puede implicar multitud de cosas diferentes, como el modo de mirar, tocar o hablar, que muestran una intención subliminal. Pero sobre todo radica en tener sentido del humor, ser una persona cariñosa y cálida, en vez de fría y manipuladora”. Para aprender a utilizar esa arma poderosa llamada atractivo natural.
Con el fin de ayudarte a aumentar tu atractivo personal te doy unas pautas:
1.- Valora tu atractivo. ¡Tú eres atractiva! Sólo tienes que darte la oportunidad para descubrirlo. Todas tenemos partes más bonitas que son las que tenemos que potenciar.
Haz una lista de al menos veinte aspectos de tu cuerpo que valores y aprecies: por ejemplo, “tengo unas piernas largas, un pelo bonito, una piel suave, un cuello esbelto, etc. Entonces, céntrate cada día en una de esas partes y mimarla. El ‘día de las piernas’, dales un masaje, hidrátalas y sal a dar un paseo”.
2.- Aprecia lo que vales. Tú eres mucho más que tu cuerpo.
En lugar de centrarte en lo que no te gusta de ti, potencia tus cualidades. ¡Seguro que son muchas!
Alguna vez te has parado a pensar en todo lo que vales? Te recomiendo un ejercicio que es muy potente, y es que escribas 100 cosas buenas de ti. Solo las buenas. En un principio te parecerá imposible, pero deja la lista en un lugar que la puedas ver y cada día obsérvate y trata de ir añadiendo alguna cosa más, ya verás cómo vas descubriendo cosas que ni te habías fijado en ellas y eso también eres tú.
3.- Un Consejo adicional si quieres ser una mujer irresistible: Sonríe Siempre.
Una sonrisa sincera irradia actitud positiva, calidez, confianza, felicidad y apertura hacia los demás. No necesita de palabra alguna para comunicar y posee gran importancia en nuestra vida.
La sonrisa honesta sale desde el corazón. Es contagiosa y abre muchos caminos.
Si llevas a cabo todas estas recomendaciones, en poco tiempo te encontrarás que al mirarte al espejo te devuelve una mirada amiga a la que amas y aprecias.
En cualquier momento puedes entrar en mi programa “Consigue tu sueño: Estar delgada”, donde encontrarás más pautas para conseguir tu peso ideal.
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